Aunque no hay certeza del cómo y cuándo es un hecho que se podría consumar en los próximos 6 meses.
Sobre esta basa trabajan afanosamente no solo los partidos de la oposición sino el chavismo, el PSUV, el propio gobierno y...los militares.
El dramático fracaso de las políticas de Maduro y su gigantesco rechazo hacen de él un Presidente insostenible a pesar de la ayuda de Padrino López.
Maduro se ha convertido en un pesado bacalao que ahora nadie quiere cargar.
Consciente que será el primero en salir del gobierno y pagar el precio de su fracaso ya Maduro hizo su jugada para tratar de protegerse ante lo que parece inevitable.
La designación de Padrino López como Superministro trata no solo de concentrar un gobierno en desbandada también es una póliza de seguro para Maduro y su familia.
En otras palabras Maduro habría puesto su destino y el de su familia en manos del hombre que tendrá a su cargo la transición y por consiguiente será factor en las negociaciones.
La presión popular es tan grande que las amarras del régimen sobre sus operadores políticos se comienzan a desatar y muchos de ellos ya están actuando como agentes libres.
No hay negociación formal y frontal entre gobierno y oposición.
Pero tras bastidores hay muchas conversaciones -¿negociaciones- entre fichas claves del gobierno y los dirigentes de la oposición que también serán factores en la negociación.
De otra forma Diosdado no habría amenazado a quienes él sabe ya están conversando con el enemigo para salvar su pellejo.
Con Revocatorio este año, o el próximo, o sin él la salida de Maduro del gobierno es un hecho.
La transición ya comenzó.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario