María Corina Machado no quiere hablar de un candidato suplente, al menos no por ahora. Ella ha dicho tajantemente: “Un sustituto es el plan de los que no quieren cambio”. Esto en alusión a los operadores de la MUD que privadamente ya están conversando sobre el asunto aunque públicamente hayan expresado su apoyo a Machado.
Esto quiere decir que desde la
perspectiva de María Corina Machado la campaña presidencial continúa con ella
como candidata. Ella, Gerardo Blyde y toda la dirigencia de esa oposición
parecen tener cifradas sus esperanzas no en una masiva protesta popular sino
más bien en la presión que los Estados Unidos pueda ejercer para que el
chavismo revierta la medida de inhabilitación.
Es muy poco plausible que el
chavismo, que ya se acostumbró a gobernar con o sin las sanciones de los EEUU,
acepte cambiar esa decisión. El empeño en mantener la inhabilitación de María
Corina tiene el mismo tono extremo, dramático y vehemente usado para suspender
las negociaciones hasta que Alex Saab fuese incorporado a las negociaciones. En
otras palabras, se puede negociar todo lo demás menos la inhabilitación.
La postura del chavismo se vería
reforzada con la casi inminente decisión de adelantar las elecciones. Dejando
en suspenso por unas semanas más la decisión táctica de hacer solo las
presidenciales o hacer una elección general tipo totum revolutum para la Asamblea Nacional, los gobernadores,
legislaturas regionales, alcaldes y concejales. Todo dependerá de cuál opción
le garantice más ventajas al chavismo.
Pero llegado el día de inscribir
candidatos María Corina Machado y los partidos que la apoyan tendrán que
decidir si participan con un suplente o no participan y denuncian las
irregularidades del proceso electoral.
Una vez recorrido todo ese camino lo
más probable es que finalmente MCM y la MUD escojan a un sustituto que
represente a la oposición en una campaña donde María Corina sería el
portaaviones mediático para garantizar su éxito. Esta tampoco es una opción
libre de conflictos ya que cuanto más se tarden en escoger a ese suplemento
aumentan las probabilidades de que sea una decisión de 2-3 factores y hasta
unipersonal de la propia María Corina.
Nada de esto resuelve y ni siquiera
aborda lo fundamental de ese proceso electoral. Y es el tema de las condiciones
y las garantías para unas elecciones justas y transparentes en Venezuela. Si
estas condiciones se mantienen o incluso empeoran es muy probable que estas
elecciones se parezcan mucho a todas las anteriores.
Y la precariedad institucional en la
que se encuentra hoy Venezuela no es incentivo para salir masivamente a votar
por María Corina Machado ni por su suplente. Tiene más sentido enfocar las
energías y los recursos en luchar por salarios justos o en renovar la
contratación colectiva de los maestros. La lucha social reivindicativa es la
que debería prevalecer en estos momentos sobre las ilusiones electorales.- @humbertotweets
No hay comentarios.:
Publicar un comentario