I. ALLANAMIENTO. El conflicto de poderes anunciado por Cabello
comenzó con el nombramiento en diciembre de los nuevos magistrados del TSJ
desde donde se adelanta toda una estrategia para legitimar el golpe de estado
continuado. El CNE se hace parte activa de la conspiración al proponer la nueva
doctrina jurídica bolivariana según la cual la Asamblea Nacional no tiene la
iniciativa para legislar en materia electoral. No hay sorpresas. El
desconocimiento de la AN por parte de los otros poderes públicos secuestrados
por el chavismo es el preámbulo de acciones mas graves como el allanamiento de
la inmunidad parlamentaria de varios diputados. Con esto el régimen pretende
dos cosas: 1) Anular el papel de la AN; y 2) Promover miedo y terror
psicológico para desmotivar y desmovilizar a la oposición. Eso viene. Es cuestión
de meses. ¿O días?
II. GOLPE ELECTORAL. El CNE se rebela en contra
de la autoridad Constitucional de la Asamblea Nacional. Al tratar de ponerle
limites a la materia electoral sobre la cual la AN puede legislar el CNE
prepara el camino para eventualmente negar el referéndum revocatorio, y
cualquier otra consulta popular que pueda afectar al régimen incluida la
elección de gobernadores que debe realizarse a finales de 2016. La jugada del
CNE parece haber tomado por sorpresa a una oposición muy distraída en estos
tiempos con su hoja de ruta. Es momento de definiciones políticas. Venezuela
vive en una dictadura y la oposición tiene el reto de enfrentarla efectivamente
con métodos democráticos. ¿Es eso posible? ¿Cual es la estrategia?
III. RESMAS BOLIVARIANAS. Con el emblemático nombre
de “Panamá Papers” se conoce a la investigación periodística que descubre el
uso irregular de paraísos fiscales por parte de políticos y empresarios de
varios países para ocultar dineros provenientes de la corrupción. Aunque hay varios
antiguos funcionarios y miembros del círculo del fallecido Hugo Chávez ni la
Fiscalía o la Contraloría General de la República han mostrado interés en
profundizar esas investigaciones. Por el contrario, ambas instituciones han
permitido los actos más escandalosos de corrupción y malversación de los fondos
del estado. Desde que se inicio este régimen en 1999 funcionarios civiles y
militares han gastado fondos públicos sin rendir cuentas. Las cantidades son
literalmente inauditables. Por la
colosal cantidad del dinero gastado, cuando se investigue, ese capitulo será
recordado como el de la Resmas Bolivarianas.
IV. relación incómoda. Diversos medios confirmaron
que José Gregorio Sulbarán Muñoz, el joven que manejaba la buseta que mató a
los dos policías en el Táchira, es miembro del PSUV y es hijo de una dirigente
del PSUV. Por lo cual se puede decir que en efecto Sulbarán esta vinculado al
PSUV. Pero para evitar mala imagen el PSUV no quiere hablar de ello. Calla. No
le conviene. En efecto el diputado Jonathan García (PSUV-Táchira) fue
entrevistado en Unión Radio el martes pasado por Esther Quiaro y trató de
responsabilizar a la oposición por este incidente. Sin embargo, en los 7
minutos que duró la entrevista García no desmintió la relación que existe entre
José Gregorio Sulbarán Muñoz y el PSUV en Táchira. Pero si aseguró que la culpa
es de la oposición.
V. ¿HAY O NO HAY ELECCIONES? Con certeza no habrá
revocatorio ni referéndum este año. Las elecciones de gobernadores son otra
cosa. Esas dependerán de como juegue la oposición, pero sobre todo de lo que
mas le convenga al gobierno. El gobierno y el PSUV se han dado 90 días para
recuperarse a través de las misiones y los repartos controlados de comida y
medicinas con la tarjeta socialista. Si para junio el PSUV no levanta en las
encuestas trataran de posponer las elecciones para el 2017. Lo cual no será
difícil tomando en cuenta que ya hay, de hecho, varios sectores de la oposición
ganados para la idea.
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